PERSONAJE: Mariano Rajoy.

Decepción. Ese es el sentimiento que me embarga cuando pienso en este individuo.
Y pena, mucha pena. Porque da pena, que con lo que está cayendo, el partido que "dirige" este individuo no esté hundiendo al Partido Fascista Antiobrero y Antiespañol, AKA PSOE en las encuestas de intención de voto. A estas alturas del partido, deberían sacarles al menos 15 puntos, no los miserables de 2 a 5.

Pero qué se puede esperar de un hombre acomplejado de si mismo, sin ideario político de ningun tipo como no sea el de "a ver si consigo una poltrona". De un individuo que no es capaz de defender lo que en teoría dice creer, por miedo a que gente que jamás le votaría, pueda decirle.
Porque esa es una realidad, Mariano. Hay gente que JAMÁS le va a votar. Unos porque son zopencos simpatizantes del Partido Fascista Antiobrero y Antiespañol, AKA PSOE. Otros, como yo, porque nos produce nauseas el imaginar, siquiera un instante, votarle a usted y a los suyos.

Sus actuaciones son tan tímidas, apocadas, miedosas... que uno no puede dejar de pensar si no será usted un topo del Partido Fascista Antiobrero y Antiespañol, AKA PSOE, colocado allí con vistas a hundir al principal rival del Partido Fascista Antiobrero y Antiespañol, AKA PSOE.

Debería estar en la calle, megáfono en mano, convocando a los suyos, que alguno tendrá, para dar la batalla política a zETAparo, y no diciendo palabritas bonitas en los micrófonos para que nada cambie.

Dios mio, qué buen líder para tan mal partido.